Dieta básica sana
"El padre de la enfermedad pudo haber sido cualquiera, pero no cabe duda de que la madre fue la mala dieta." - Hipócrates.
Todo lo que ingerimos a lo largo del día representa una medicina o un tóxico en potencia para nuestro organismo.
Es
fundamental para lograr una salud férrea, mantener una dieta
equilibrada, realizar algo de ejercicio y apoyarse con suplementos
vitamínicos, minerales y con plantas medicinales de alta potencia para
corregir las posibles carencias nutricionales.
¿Qué es una dieta sana?
Es
una dieta que proporciona niveles óptimos de nutrientes para el
mantenimiento y regeneración del organismo, y bajos niveles de
alimentos perjudiciales para la salud.
Una
alimentación equilibrada tiene una base de mucha fruta y verdura
(contienen fibra, vitaminas y minerales), aceites vegetales no
refinados (aceite de oliva, aceite de lino) y pescado azul. Además, en
cantidades limitadas hidratos de carbono complejos y naturales
(cereales integrales, arroz integral, legumbres, etc). Alimentos como
los lácteos, la carne y los huevos y productos como pan blanco y pasta
han de ser ingeridos de forma eventual. Otros, como el azúcar o los
alimentos procesados industrialmente y las grasas saturadas, deben ser
evitados, como veremos más adelante.
Actualmente,
somos víctimas de carencias nutricionales importantes que se
manifiestan poco a poco en una salud frágil, un sistema de defensas
pobre y un envejecimiento celular prematuro. Todo ello es debido a
múltiples causas:
* Una nutrición desequilibrada.
* La pobreza de nutrientes en los alimentos, debido a los métodos agresivos de cultivo actuales y a los procesos industriales.
*
Nuestra exposición, en la actualidad, a un número mayor de factores
oxidativos, como radiaciones, radicales libres, estrés, metales pesados
y otros.
Esto crea, en la
mayoría de los casos, la necesidad de suplementar vitaminas, minerales
y otras sustancias naturales, para cubrir las carencias provocadas por
una nutrición errónea.
La
ingesta de los suplementos nutritivos y de los extractos herbarios de
FISIOSAN le permitirá, junto con una alimentación equilibrada, a
mantener una buena salud, a prevenir enfermedades y a eliminar las ya
existentes, equilibrando el organismo de forma natural y sin efectos
dañinos.
* Alimentos recomendables
Obligados
" Frutas completas y zumos naturales no ácidos. 4/5 Raciones diarias
"
Verduras y hortalizas crudas, al vapor, al horno (de hoja verde, todo
tipo de coles, raíces, etc). 1 Ración cruda (ensalada) y otra cocinada
al día, como mínimo
" Germinados (brotes de soja, de alfalfa, de trigo, etc). 2/3 Veces semanales
" Semillas y nueces (en poca cantidad). 2 Veces semanales o más
" Aceite de oliva virgen prensado en frío, aceite de lino. Diario
"
Pescado azul de aguas frías (salmón, arenque, sardinas, boquerones,
caballa, trucha de río). Se puede sustituir por una cucharada diaria de
"aceite omega-3". 2/3 Veces semanales
" Agua mineral y zumos (3:1). 8 Vasos grandes al día (entre los dos)
Opcionales
" Carnes biológicas (mejor de caza o no estabuladas). Evitar el cerdo.
" Huevos biológicos. 2-6 a la semana
"
Cereales integrales (arroz, trigo, avena, centeno, mijo, cous-cous,
pasta, pan, etc). Legumbres (soja, lentejas, garbanzos, judías,
guisantes, etc). Tofu, seitán.
"
Lácteos (mejor olvidar la leche de vaca; la leche de cabra es más
digestiva.) Es mejor tomar productos fermentados como yogur biológico
(con bifidobacterias, etc) y quesos frescos (mejor de oveja o cabra). 1
Ración diaria, máximo
Se
recomienda que todos los alimentos procedan de cultivos o cría
biológicos, en la medida de lo posible, debido a la ausencia de
pesticidas, metales pesados, antibióticos, hormonas y otras sustancias
tóxicas, en su interior.
* Alimentos perjudiciales
Limitar
su consumo al máximo, ya que, no sólo no aportan ningún nutriente, sino
que provocan, tarde o temprano, trastornos en la salud. Son:
" Azúcar refinada y dulces
" Grasas saturadas (de procedencia animal) y grasas "Trans" o hidrogenadas (margarina, bollería, aceites refinados, etc)
" Sal en exceso
" Embutidos (a excepción del jamón ibérico de bellota, en pequeñas raciones)
" Harinas blancas refinadas (pan blanco, pasta blanca, etc)
"
Productos procesados industrialmente (productos preparados,
precocinados, enlatados, en conserva) con conservantes o colorantes
químicos.
" Carne roja y
aves, en exceso (más de una vez por semana). Procurar que la carne sea
de origen biológico o de caza. En especial, evitar el cerdo y la grasa
animal.
" Tabaco y alcohol (sí se recomienda una copa de vino tinto bueno, diaria)
DIETA BASICA SANA
A continuación, exponemos una dieta básica equilibrada, que puede servir como modelo:
1. Líquido
Bebe mucho, en cantidades pequeñas repartidas durante todo el día y
entre comidas, un mínimo de 2,5 a 3 litros, entre agua y zumos de
fruta, en una proporción de 2/1. Hay que evitar el café en lo posible,
los refrescos con cafeína y gaseosas. Evitar la leche de vaca o no
superar más de un vaso al día.
2. Desayuno
Fruta, zumos naturales, pan integral con aceite de oliva y tomate. Algo
de queso (mejor fresco), frutos secos, malta, infusiones, achicoria.
Leche de soja. Tortillas.
3. Almuerzo
Fruta, queso de oveja o de cabra, tomate con aceite de oliva, tortilla
española o francesa, boquerones, etc.
4. Comida
Verduras crudas (ensaladas) y cocinadas, arroz integral y cereales
integrales (en brotes), legumbres cocidas o en brotes (como lentejas,
garbanzos, soja, etc.). Tofu, seitán. Pescado (mejor azul), carne de
cordero (sin grasa) o de pollo de granja, pato o pavo, hasta dos veces
a la semana. Huevos de granja, pero no fritos. Nunca carne de cerdo ni
embutidos: como única excepción: jamón serrano de bellota. Patatas,
fruta.
5. Merienda
Yogur con fruta, plátanos, frutos secos, infusiones
6. Cena
Más o menos como la comida, también sopas o hervidos de verduras, etc. Pan integral.